Su pintura refleja un estado social y económico. Vivieron en un ambiente totalmente libre de la presión del público cliente o de la sociedad puesto que sus compatriotas no se interesaban por ellos. Varios mecenas cubrieron gastos y se hicieron cargo de su producción puesto que oficialmente no podían asistir a la Escuela de Bellas Artes. Los cuadros resultantes se exportaban a Bélgica o se almacenaban en Kinshasa. Observaron corrientes artísticas en curso situadas a miles de kilómetros, a través de la documentación a su alcance o la orientación de sus mecenas. Eran pintores libres, desconocidos, sin la obsesión de exponer, ni seguir la corriente pictórica de moda. Podían cambiar de estilo sin preocupaciones. Similar a nuestra Edad Media en lo que a estructura se refiere.
No obstante, si examinamos su obra, podemos descubrir la influencia de las tendencias pictóricas europeas del momento. Sus mecenas no sólo cubrían gastos sino que también orientaban y enseñaban. Tras haber consultado a varios expertos citamos las escuelas europeas que podían haber inspirado a estos pintores en gran medida autodidactas y libres.
Que un pintor africano de la Pre-Independencia no firme sus cuadros es normal. Era consciente de que no iba a exponer en su país y no sabía donde iría a parar tras entregarlo al mecenas. No se preocupaba por el destino de su obra.Tras la independencia el clima pictórico cambio y el artista fue más consciente del impacto de su obra. Ahora exponen en grandes galerías y se les encuentra en Internet