El negro es creyente de los pies a la cabeza, durante las 24 horas del día. Presiente espíritus por todas partes y vive pendiente de esas fuerzas. La religión católica con sus imágenes y sus ritos y su colonizaciion ofrece normas y caminos capaces de controlar esa confusión espiritual. Se ha instalado por todas partes.
Los jesucristos negros celebran ceremonias sobrecogedoras con cánticos y bailes. El profeta está en contacto con el Más Allá y hace milagros y tienen seguidores como Jesucristo los tuvo. Rezan en el campo y no tienen ningún tipo de jerarquías salvo las que el prestigio y capacidad de cada fiel van creando pos si mismas.